ERMITA DE IGUÁCEL
Al fondo del valle de la Garcipollera se levanta la iglesia del antiguo monasterio de Santa María de Iguácel. Tanto en la solución de la portada, como en los motivos de los capiteles, además de elementos característicos como el ajedrezado jaqués, se observa una gran similitud con la Catedral de Jaca.
Es uno de los escasos edificios románicos en España fechado y firmado. De ahí su crucial importancia. Sobre la puerta de acceso y bajo los canetes que sujetan el tejadillo aparece una inscripción en latín: “Esta es la puerta del Señor… iglesia fundada en honor de Santa María. Se fabricó por orden del conde Sancho junto con su esposa llamada Urraca; se terminó en la era de 1110 (corresponde al 1072) reinando el rey Sancho Ramírez en Aragón…”.
Esta inscripción y la evidente similitud constructiva con la Catedral de San Pedro de Jaca permite fechar la construcción de la seo jaquesa, y catalogar ambos edificios como dos de los más antiguos del Románico en España.
Tanto la imagen de la virgen, como el frontal pictórico dedicado a la vida de María están depositados en el Museo Diocesano de Jaca. Llama la atención la representación iconográfica de la vida de la Virgen, algo excepcional en el arte Románico.