JACA PIRINEOS, PARAISO DE MONTAÑA

MARTILLUÉ

Arquitectura tradicional 

Si callejeamos por el pequeño casco urbano de Martillué descubriremos interesantes ejemplos de la arquitectura tradicional de este territorio pirenaico: Casa Francho, Casa Juan Domingo, Casa El Yerno o Casa Estuba. Un tipo de arquitectura a la que han recurrido sus gentes durante generaciones adaptándose a sus necesidades de vida y, sobre todo, al clima, al paisaje y a los materiales propios de su entorno.

La piedra es el material fundamental. Sobre todo trabajada en mampostería, es decir, dispuesta de forma irregular. Con esta técnica se formaban gruesas paredes de hasta 60 centimetros de anchura, las cuales están abiertas por pequeñas ventanas y grandes arcos de entrada. Para estos elementos también se recurre a piedra pero en este caso bien trabajada y escuadrada.

Para rematar la construcción, ya fuera una vivienda, un granero o un pajar, se recurría de nuevo a la piedra. En forma de losas se dispone sobre una estructura de madera a dos aguas para permitir el desagüe del agua de lluvia y el deshielo de la nieve.

Un paseo por el entorno natural de Martillué 

Desde Martillué podernos tomar los senderos y caminos de su entorno para dar agradables paseos por la Val Ancha alejados de cualquier ruido. Siempre bajo la gran silueta de Peña Oroel.

Esta localidad está rodeada de llanos campos de cereales y de pastos a través de los cuales podremos acercarnos a la curiosa forrnación geológica de los Capitiellos. Una alineación arenisca que discurre desde Ulle hasta Sabiñánigo separando lo que se conoce tradicionalmente como Val Estrecha y Val Ancha.

Igualmente se puede seguir la ribera del pequeño río Tulivana, afluente del rio Gállego, para pasear junto a él hasta la vecina localidad de Orante donde el llano de Martillué se acaba y empieza El Cerristón, un pequeño promontorio sobre el que se levantan las casas de Orante.

El Ecomuseo de los Pirineos 

El Ecomuseo de los Pirineos fue una iniciativa del Ayuntamiento de Jaca para poner en valor el patrimonio natural y cultural de sus pueblos así como sus formas de vida tradicionales. Los ecomuseos no pretenden explicar al visitante estos recursos de manera aislada sino entendiendo el territorio como un todo único; explicando la relación de los seres humanos con su entorno.