MUSEO DIOCESANO
El Museo Diocesano de Jaca fue inaugurado en 1970 como museo de arte sacro medieval, con el doble objetivo de servir de testimonio de fe de las gentes de la Diócesis de Jaca y convertirse en foco de cultura del Alto Aragón. Su creación fue consecuencia de una serie continuada de hallazgos de pintura mural medieval en iglesias y ermitas de la diócesis que se iniciaron en la década de 1960-1970. Estas obras románicas y góticas constituyeron el núcleo expositivo fundacional del Museo y siguen siendo, por su interés y singularidad, uno de sus principales atractivos.
En 2003 las obras llevadas a cabo en aplicación del Plan Director de la Catedral de Jaca obligaron al cierre del Museo y dieron lugar a la elaboración de un nuevo proyecto museístico que, respetando su carácter fundacional, pretende mejorar el Museo y adaptarlo a las necesidades del siglo XXI. La reapertura, tuvo lugar el 9 de Febrero de 2010, Año Santo Compostelano.
El primer atractivo del Museo Diocesano de Jaca está en su ubicación, en el claustro y otras dependencias anexas de la catedral; además la restauración ha permitido recuperar parte del espacio original y exhibir nuevos capiteles románicos del claustro.
La gran obra maestra de los murales, calificada muchas veces como “La Capilla Sixtina de Románico”, es el conjunto de la iglesia de los Santos San Julián y Santa Basilisa de Bagüës, que se muestra en una recreación del templo. Un gran fresco que resume el catecismo en imágenes, desde la creación de Adán hasta la Ascensión de Cristo. Por su belleza y expresividad, destaca por ser uno de los mayores conjuntos de pintura románica que se han conservado
A su lado, no desmerecen la Epifanía de la iglesia de la Asunción, en Navasa, ni los murales provenientes de los ábsides de las ermitas de San Juan en Ruesta y nuestra Señora del Rosario, en Osia; o de las iglesias de Susín, Urriés, Sieso, Ceresola, Ipas, Sorripas y Concilio.
El arte Románico, clave de la colección, está también representado por la talla de la Virgen de Igúacel o el sepulcro del conde Sancho Ramírez.
Con las obras se ha duplicado el espacio expositivo, dedicando las nuevas estancias al gótico, renacimiento y barroco, que también cuentan con excelentes muestras. Destaca, la adecuación del secretum, el archivo de la catedral, donde se han restaurado sus pinturas renacentistas y que ahora guarda las más destacadas obras de orfebrería del museo.
¿Quién dice que un museo de arte medieval es sólo interesante para público adulto?
¿Has participado en alguna ocasión en sus talleres?
El Juego de la Oca, talleres de planta medicinales, talleres de gremios, música y pintura medieval para niños pero también se realizan talleres de pintura al fresco para adultos y muchas cosas más.
Se trata de un Museo vivo, en el que no sólo destaca la parte expositiva sino que realiza una excelente labor de investigación, restauración y divulgación de sus piezas. Asimismo el Museo Diocesano organiza conferencias, exposiciones temporales, presentaciones de libros, conciertos, talleres y actividades didácticas tanto para público infantil como adulto y visitas guiadas adaptadas para todo tipo de público, visitas no sólo de sus dependencias sino también de la ciudad, durante todo el año.